Durante mi época de estudiante, leí muchos libros que me convirtieron en lo que soy. Estoy muy agradecido con ellos. Como juntaletras, he ido a varios institutos hablando de mis libros (algunos han surgido de esas visitas). Como docente, también he disfrutado de muchos libros junto a mi alumnado. Y ahora quiero tener la oportunidad de dar mi granito de arena a estas historias. 

Esta semana empezamos el nuevo curso, pero eso no quiere decir que no viajemos también al infinito y lo haremos gracias a El Tiempo del Príncipe Pálido. Si eres estudiante o docente, puedes solicitar una copia digital de El Tiempo del Príncipe Pálido o una en físico a precio de imprenta. Si es seleccionada por un grupo, también puedo ir a dar alguna charla o hacerla online.

El Tiempo del Príncipe Pálido es una novela de doscientas páginas aproximadamente, perfecta para estudiantes de 3º ESO a 1º Bachillerato, que relata la historia de dos jóvenes hermanas que se dedican a cazar monstruos ficticios… hasta que se topan con uno muy real. Es una historia de fantasía y se puede leer sin haber leído los otros libros que he escrito (es más, es la mejor puerta para estas historias).

¿Te apuntas a salvar el omniverso?

Carlos J. Eguren
autor@carlosjeguren.com
¡Cuidado! No leas esta biografía. ¡Te he dicho que no la leas! Si la lees, estarás condenado… En serio… ¿Sigues leyendo? Luego no me digas que no te lo he advertido: Carlos J. Eguren está muerto, solo que no se ha dado cuenta y sigue escribiendo desde ultratumba. Es escritor en Castle Rock, profesor en Arkham, periodista en Midian, divulgador cultural en Carfax, juntaletras en el omniverso y pasto de los gusanos en todas partes. Ha publicado cuatro novelas: Hollow Hallows, Devon Crawford y los Guardianes del Infinito, El Tiempo del Príncipe Pálido y La Eternidad del Infinito. Ya prepara mediante ouija sus próximas historias que formarán parte del libro de los muertos. Espera volver a aparecerse cuan primigenio cuando pueda escaparse de R'lyeh… Ahora ya has leído su biografía, ahora ya estás maldito. ¡Bienvenido!

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