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En El corazón oscuro de los Sith, Vader afrontará las largas sombras de su pasado. |
«Siento ira»-Vader.
«Yo soy tu padre». Con estas palabras, Darth Vader dejó anonadado a la mayoría de espectadores que presenciaron el oscuro nuevo capítulo de Star Wars: El Imperio contraataca. Ahora, una serie de cómics nos lleva a lo que ocurrió justamente después con Vader y nos da respuestas a varias preguntas que nos hemos hecho desde entonces.
Uno de los aspectos positivos de los cómics de Star Wars editados por Marvel es que abrazan toda la mitología de la saga, desde la trilogía original hasta las precuelas y secuelas, sirviendo de puente y olvidándose del odio de patio de colegio de algunos supuestos seguidores de la saga, que infestan las redes sociales. Uno de los ejemplos claros está en Darth Vader: el corazón oscuro de los Sith, serie del guionista Greg Pak y el dibujante Raffaele Ienco.
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Foto de mis últimas lecturas sobre Vader… Si sale el Lord Oscuro, hay que leerlo. |
Caída en las sombras
Aunque ya tuvimos el espectacular arranque de Vader en solitario en la serie escrita por Kieron Gillen y una profundización en Vader, lord oscuro, Darth Vader: El corazón oscuro de los Sith no se siente como un título superfluo, sino que ahonda en la psique del tenebroso villano que impactó a todos los espectadores desde su primera aparición en Star Wars en 1977.
Esta nueva historia tiene lugar tras el famoso «yo soy tu padre» y el rechazo de Luke a su legado en El Imperio contraataca, lo que llevará a Vader a buscar qué fue lo que pasó con sus hijos. Ese camino le conducirá hasta Naboo, al féretro de Padmé Amidala, pero antes se cruzará con una mujer con el rostro de… la mismísima reina.
No es Padmé, no es el engaño a la muerte que buscaba Anakin en los Sith para salvarla, es una de los señuelos que vimos en La amenaza fantasma y El ataque de los clones. Es así cómo la serie se dedica a llenar varios huecos interesantes, recupera personajes de las dos primeras películas de la saga y explora también lo que supuso para Anakin Skywalker morir y renacer como el terrible Darth Vader.

La tragedia de Vader
El primer tomo de El corazón oscuro de los Sith nos presenta los elementos claves del recorrido de Vader en busca de respuestas sobre el complot de Obi-Wan, Yoda y Bail Organa para salvar a los hijos de Skywalker y Amidala de la sombra de Vader. Por un lado, tenemos el viaje físico y, por otro, el viaje psicológico que nos evoca en varios aspectos a lo visto en Vader (que transcurre poco después de Una nueva esperanza) y Lord Oscuro (que transcurre poco después de La venganza de los Sith). Una excelente presentación.
El segundo tomo de esta nueva serie de Darth Vader une a dos personajes improbables como son Ochi (al que conocimos en El ascenso de Skywalker) y al mismísimo Darth Vader. Desde que vimos El imperio contraataca y Vader insinúo su posible traición al Emperador para tomar el poder, los creadores de los cómics y novelas han aprovechado esta premisa. Lo mismo vuelve a ocurrir aquí, pero se liga a toda la seudotrama de Exegol en el Episodio IX. Por tanto, aparte de arreglar lo hecho por Chris Terrio (que está llevando su tiempo), sirve para dar conocer al asesino Ochi y ampliar varias ideas descartadas del guion de Colin Trevorrow para el que iba a ser el episodio final de la saga.
El tercer tomo de estas aventuras de nuestro Lord Sith se centra en el crossover de La guerra de los cazarrecompensas, que toma la premisa de cómo el hampa, el Imperio y los rebeldes se enfrentan por recuperar el cuerpo de Han Solo, congelado en carbonita. Esta idea, surgida en Sombras del Imperio, se ha vendido a bombo y platillo, sobre todo al explotar hilos abandonados tras el «fracaso» comercial de Solo. Por suerte, de vez en cuando, de estas ideas comerciales surgen algunos aspectos interesantes y en este tercer volumen vemos todos los juegos de poder y las traiciones internas del Imperio, y, aunque se siente que avanza más lento que nos gustaría, nos regala algunos grandes instantes. Por desgracia, sacrifica el carácter introspectivo del primer tomo, mi favorito.

Horizontes de guerra
Aunque persiste sienta sensación de que la serie de Disney + de Obi-Wan o algún otro de los productos audiovisuales que se nos acercan “pisen” algunos momentos de la trama (todavía hay gente que “llora” por los cambios que The Bad Batch suponen para Kanan, el último padawan), yo soy de los lectores que prefiere quedarse con esta entretenida historia, con sus otras posibles adaptaciones, y con los sentimientos trágicos que rodean al personaje de Vader. No olvidemos que, como defiendo, Star Wars es una tragedia griega.
En cuanto al guion de Greg Pak, nos encontramos con un guionista más completo que en su época de, por ejemplo, Planeta Hulk. Aquí toma todos los elementos de la saga y se dedica a profundizar en Vader y su pasado, llevándonos a descubrir que Amidala dejó a varios de sus agentes en planetas como Tatooine para liberar esclavos como el joven Anakin. Muchos se han quejado de ver demasiada humanización en Vader, cuando creo que, realmente son retales así, los que hacen que comprendamos que Vader es más trágico todavía. Pese a ciertos atisbos de luz, él ya lo ha perdido todo y solo puede seguir hundiéndose. Ya no puede cambiar lo que ha pasado.
Sobre el dibujo de Rafaelle Ienco, es más que correcto, con composiciones con cierto dinamismo y sin pecar demasiado de intentar imitar al reparto de la película, aunque sin sacrificar tampoco ciertas semejanzas. El dibujante reproduce ciertas escenas de las películas para jugar con los paralelismos que utiliza Pak, pero sin caer en el recurso del Photoshop para «adaptar» los fotogramas. Ienco sabe retratar el mundo de Star Wars y esta pieza encaja en el resto del rompecabezas de la saga.
En conclusión, tenemos un espectacular arranque de una serie que abraza todos los elementos de la saga a la hora de desarrollar y profundizar en el corazón oscuro de la Saga Skywalker: Darth Vader.
[Esta reseña se irá actualizando con los comentarios de los siguientes tomos].